jueves, 1 de agosto de 2013

Cuidarse



Tendemos a pensar que cuidarnos significa ponernos muchas cremitas, comer sano, cuidar la postura, hacer deporte o beber mucha agua.

Y no es que no sea así, o al menos en parte.

Pero si vamos un poquito más lejos, nos daremos cuenta de que más allá del cuerpo, también está la mente.

A nivel intelectual, si te cuidas, estimularás tus sentidos, tu cultura, tu pensamiento.
Te rodearás de gente que te permita aprender, que fomente tu curiosidad y enriquezca tus inquietudes.
Leerás, irás al cine, al teatro, a museos...

Todo eso está genial. Lo sabemos. Y en la medida en que nuestro tiempo y economía nos lo permita, lo hacemos.

Pero yo me pregunto... ¿Hay algo más?

Y mi respuesta es un SÍ.

Solemos olvidar la parte emocional. Aquella más o menos inconsciente, con la que unos estamos más conectados que otros. Ya sea por nuestra personalidad o porque la vida nos ha brindado experiencias que nos han hecho cuestionarnos acerca de ella.
Las emociones están presentes en las personas ya desde antes de nacer. Vinculadas en un primer momento a la corporalidad y a necesidades básicas para ir haciéndose cada vez más complejas según vamos creciendo.

Así es como se van ligando progresivamente más al lenguaje y el pensamiento.

Todo lo que piensas y te dices a lo largo del día.
Todo lo que los demás te provocan y PERMITES que te provoquen.
El espacio y valor que das a sus palabras y sus gestos.
Pero por encima de todo el espacio y valor que te das A TI MISMO.

¿Cuánto te criticas y te perdonas?
¿Cuánto te reconoces los pequeños-grandes pasos que das para conseguir lo que quieres?

Atreverse ya es un gran logro, independientemente del "éxito" que tengas después.
Párate a pensar. A conocerte a ti mismo.
Siéntate a tomarte lo que más te guste y comparte ese momento con esa persona que tienes enfrente, delante del espejo: TÚ.

Aprende a cuidarte permitiéndote equivocarte y ver lo maravilloso que es aprender y crecer.
Atrévete a probar cosas nuevas. Puede que descubras que eso no te gusta nada ¡o quizá sí!

La magia estaba esperando a la vuelta de la esquina.
La magia te ESTÁ esperando a la vuelta de la esquina.

Esto no significa que no vayas a tener miedo.
El miedo (aunque a veces sea irracional) tiene su función.
Es un mecanismo que pretende protegernos ante el dolor.

Está bien. Pérmitete sentirlo sin que llegue a paralizarte.
Piensa que todo lo que no conoces, para llegar a "dominarlo" y tener una opinión consistente sobre ello, sólo requiere de tiempo.

Ve abriendo sin prisa ese gran regalo que es la vida y tú mismo, siendo consciente de que EN TUS MANOS ESTÁ cambiar y ser como tú quieras ser.


En tus manos está disfrutar de lo que descubras.



Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...